Resiliencia es un término de moda. Quién no ha visto en Linkedin una cantidad de posts hablando de lo mismo, cuando salimos del confinamiento. El verdadero interés de esta definición aparece cuando se aplica a las empresas, la resiliencia en el trabajo.
En momentos turbulentos o cambiantes, esta característica es crucial para la supervivencia de la organización. Y por supuesto, una de las primeras cosas que nos viene a la cabeza es el teletrabajo.
¿Qué es la resiliencia en el trabajo?
Según la RAE, la resiliencia es la capacidad de adaptación de un ser vivo, frente a una situación adversa. El ejemplo estrella es el confinamiento y la repentina adopción del teletrabajo. Si tenemos en cuenta que la mayoría de empresas lo que hicieron fue adoptar el mismo modelo presencial, pero en remoto, no se puede decir que las organizaciones españolas hayan sido resilientes. Si no más bien sus trabajadores. Aunque en la actualidad, las empresas que han sabido adaptarse, si han desarrollado verdaderos modelos de trabajo a distancia.
Si tomamos en consideración la segunda acepción de la RAE, la resiliencia implicaría la capacidad de un material para volver al estado inicial una vez que ha cesado la perturbación. Pero, ¿volver a lo de antes cuando todo el panorama ha cambiado es realmente lo óptimo? La respuesta parece obvia.
¿Cómo mejorar la resiliencia en el trabajo?
Para las organizaciones es simple. Las que no se adapten al entorno, ya sea digitalización, trabajo remoto, Inteligencia Artificial o lo que sea; no sobrevivirán. Tampoco serán capaces de retener talento. Según una encuesta de LinkedIn, el 21% de los españoles que ha dejado su trabajo lo ha hecho por falta de flexibilidad, mientras que el 28% está pendo hacerlo por el mismo motivo.
Pero la falta de esta capacidad de resiliencia en el entorno laboral siempre afecta al mismo colectivo. A los más jóvenes. Frente a una guerra, una pandemia o una crisis económica; los primeros en perder su empleo son los jóvenes, ya que son quienes tienen contratos temporales.
A su vez, con el teletrabajo surgen nuevas capacidades en las que hay que incidir más y que hoy en día cobran más importancia para las empresas: visión de conjunto, comunicación, organización y aprendizaje. Esta última, sería la que mayor relación guarda con la resiliencia.
Los jóvenes demandan más resiliencia en el trabajo
Después de años de vivir con condiciones laborales precarias como la excesiva temporalidad, los jóvenes ya lo han asumido. Pero hay otras cuestiones a las que no están dispuestos a renunciar.
- Salario digno: los salarios que perciben los jóvenes, en la mayoría de los casos, no les permiten independizarse. Por esta misma razón, no están dispuestos a trabajar en entornos laborales con marcadas diferencias salariales. Piden mayor transparencia y menos organizaciones piramidales.
- Trabajo remoto: para la mayoría de los jóvenes el tener que ir a una oficina todos los días responde a una falta de confianza por parte de su superior. De hecho, cada vez es más habitual que se rechacen ofertas de trabajo si no son 100% remoto. Los jóvenes ven esta modalidad, como una herramienta más de flexibilidad que va de la mano con la resiliencia.
- Ubicación: según un estudio de AdQualis, un 53% de los encuestados afirman que esto es un determinante a la hora de decantarse por un empleo. Cada vez que son más los jóvenes que no disponen de vehículo. Además, ese tiempo de desplazamiento prefieren invertirlo en salir con sus amigos o ir al gimnasio.
- Plan de carrera: sin lugar a dudas, el punto más relacionado con la resiliencia. Los jóvenes buscan formación constante y no quedarse en conocimientos estancos. Una organización que los ayude a crecer tanto dentro como fuera de la misma.
- Retribución flexible: no tiene las mismas necesidades una persona que está por jubilarse que otra que se acaba de incorporar. Por ello exigen a las empresas que se adapten a las nuevas exigencias de los tiempos que corren. Desde terapia online, ticket restaurante, gimnasio o presupuesto para formación.
Equipos de trabajo resilientes
La nueva soft skill estrella que trajo el teletrabajo y la pandemia. Si gestionar equipos siempre fue complejo, hacerlo en remoto requiere de una mayor resiliencia. Esto demanda líderes resilientes que empoderen a sus empleados a través de la autonomía y la confianza.
¿Cómo son estos equipos?
- Tienen una cultura de empresa sólida, con un enfoque cooperativo
- Pueden adaptarse a adversidades e incluso llegar a preverlas
- Cuentan con una excelente coordinación. Cada uno sabe que tareas le corresponde
- Son concretos y objetivos, para facilitar la toma de decisiones
- Tienen capacidad critica, para detectar dificultades y superarlas
Con todo esto podríamos decir que, el teletrabajo no hace más resiliente a una empresa, sino que es un síntoma de que esta lo es. No es solo una acción para generar employer branding, sino también una señal de la capacidad de adaptación y supervivencia que tiene.